Autor: Nicola Lagioia
Serie: -
Género: True crime, non-fiction, hechos reales
Editorial: Random House
Páginas: 464
En marzo de 2016, en un apartamento situado a las afueras de Roma, dos jóvenes de buena familia se pasaron varios días de fiesta, poniéndose hasta arriba de cocaína, pastillas y alcohol. Decidieron invitar a alguien y tras llamar a varios amigos que no podían o no contestaban, dieron con Luca Varani, un chico al que apenas conocían. Le ofrecieron drogas y dinero a cambio de sexo. Se divirtieron hasta que empezaron a torturarle y terminaron asesinándolo a cuchillazos y golpes de martillo. Tenía 23 años, era hijo de una familia humilde de la periferia, un buen chaval que se buscaba la vida como podía. Nadie entendió por qué lo hicieron, no hubo respuestas para tanto horror. Desde la cárcel uno de los asesinos dijo que «querían saber que se sentía al matar a alguien». Tenían 28 y 29 años: Manuel Foffo, proveniente de una familia de comerciantes, y Marco Prato, un conocido relaciones públicas de la noche gay romana, hijo de un profesor universitario.
El escritor Nicola Lagioia se obsesionó con el caso. Acababa de recibir el Premio Strega por su anterior novela, el premio más importante de Italia, y dedicó cuatro años de su vida a esta historia. Habló con todos los implicados, con los amigos y familiares de los tres chicos, accedió a la investigación y al juicio y llegó a cartearse con uno de los culpables. Se sumergió en lo más oscuro de la noche romana y se adentró en la inaccesible burguesía romana. El resultado es una crónica literaria mayúscula: una investigación sobre la naturaleza humana bajo el silencio de las calles vacías de la ciudad eterna.
Valoración: ⭐⭐⭐☆☆
Lo primero aconsejaros que si no habéis viajado nunca a Roma y tienes intención de visitar la ciudad eterna, no leas el libro del que os vengo a hablar.
Este libro tiene dos protagonistas indiscutibles. Por un lado, Roma, ciudad imperial, ciudad eterna, pero desde un punto de vista deprimente, en el que sólo aparece la basura por las calles, la inmundicia, la corrupción. Una amante a la que el autor intenta abandonar pero que lo tiene atrapado sin remedio.
Por otro lado, el crimen, real, que el autor intenta mal que bien explicar, si es que la maldad tiene alguna explicación lógica. Y lo hace centrando las miras no sólo en los criminales, Marco Pratto y Manuel Foffo, y la víctima Luca Varani, sino también en el circo montado a su alrededor por la prensa. Y es que por intentar explicar, razonar, el crimen, todo el mundo juzga incluso a la víctima, intentado culpabilizarla en algún caso como forma de justificar lo injustificable.
Es una lectura densa, interesante pero en algún momento pesada, y de tan negra, llega a ser deprimente.