martes, 1 de octubre de 2024

"Habíamos quedado el viernes" de Salvador Navarro


Título: Habíamos quedado el viernes
Autor: Salvador Navarro
Serie: -
Género: Narrativa
Editorial: Autoeditado
Páginas: 283

A Carlota le propusieron un juego de pequeña, ser la mamá suplente del vecino recién nacido, para así permitirse los padres un respiro de vez en cuando.

Ella, hija única de un matrimonio violento, tomó el juego al pie de la letra, de modo que protegió al pequeño Fernando, a su manera, hasta que los dos se hicieron universitarios.

Fue entonces cuando apareció un hombre maduro que sedujo a los dos hasta extremos perversos y llegó la implosión en la vida de Tota y Fer.

Treinta años después, sin el mínimo contacto entre los dos, ella llama a la puerta del que fue su hijo

—¿Cómo está mi niño?

Fernando, con cincuenta años y recién viudo, se derrumba en sus brazos, sin imaginar qué puede haber traído a Tota a su casa.

Valoración: ⭐⭐⭐⭐⭐

Salvador lo ha vuelto a hacer. Una vez más nos trae una historia que pone los vellos de punta, la piel de gallina y el corazón en un puño.

Carlota y Fernando eran amigos inseparables desde que a los tres años a ella le encargaron cuidar del bebé. Unidos por un terrible secreto, sus vidas parecen eternamente ligadas, hasta que aparece un tercero en discordia. Treinta años más tarde, una Tota emocionalmente herida aparece de improviso en la puerta de Fernando, viudo reciente. 

Esta es una historia de encuentros y desencuentros, en el que el pasado se encuentra con el presente. Pero sobre todo es una historia de sentimientos, desbordados o reprimidos, a flor de piel o enterrados en lo más profundo del alma. 

El libro está escrito alternando escenas del pasado, narrado en tercera persona, y del presente, narrado en primera persona desde el punto de vista de Fernando. Con esto Salvador consigue que conozcamos la historia no solo desde la perspectiva de uno de ellos sino desde la de todos los protagonistas. Con esas "viñetas" conocemos la historia de Tota y Fer, de su historia de amor, un amor que va más allá del romántico. 

Sentirse querido es una experiencia que da coherencia a la propia vida, 
abre los pulmones, hace que todo tenga sentido.