"Llévame a casa" de Sebastian Fitzek

Título Llévame a casa 

Autor Sebastian Fitzek 

Género Thriller 

Editorial Ediciones B 

Páginas 368

El autor de TERAPIA vuelve con una trama opresiva y angustiante que juega con los nervios del lector y lo mantiene al límite hasta el final.

Quien sabe la hora de su muerte ya ha empezado a morir.

Es sábado, poco despues de las 10 de la noche y Jules está pendiente del telefono. Es voluntario en un servicio telefónico de acompañamiento para mujeres que vuelven solas a casa por la noche. Nunca ha vivido una situación en la que la mujer al otro lado de la línea estuviera realmente en peligro, hasta la llamada aterrorizada de Klara. La joven está convencida de que un hombre la sigue, alguien a quien conoce y que ha dibujado con sangre la fecha de su propia muerte. Y ese día está a punto de empezar.

Críticas:

"Fitzek crea una tensión tal que duele".

Krimi-couch

"Una historia capaz de inquietar incluso al mismo autor".

Express

"Los thrillers de Fitzek son impresionantes y están llenos de giros salvajes".

Harlan Coben

"Sebastian Fitzek es, sin lugar a dudas, uno de los escritores de novela criminal más sugerentes. Sus thrillers son tan intensos que es imposible abandonarlos".

Karin Slaughter

Valoración ⭐️ ⭐️ ⭐️ 

El comienzo de la sinopsis lo dice todo. Este es un thriller psicológico muy oscuro, con una atmósfera opresiva, angustiante, claustrofóbica (aunque no es de habitación cerrada).

Jules es un operador de una línea telefónica dedicada a acompañar virtualmente a personas que por diversos motivos tienen miedo de pasar un callejón oscuro o de salir tarde de trabajar. Esta noche, aparentemente rutinaria, recibe la llamada de una mujer que dice estar amenazada de muerte. Pero si le cuenta su historia, él también será su objetivo.

La atmósfera opresiva, la presión de resolverlo en una sola noche, ese final digno de acordarse de la familia de alguno, debería haber hecho de esta lectura una de esas que no puedes parar. Pero me ha costado entrar en la trama, no conseguía conectar.

Y ¿realmente era tan necesario ese regodeo del sadismo de M.? Creo que fue rizar el rizo. La trama habría funcionado igual (o mejor) sin ese punto gore.